En un contexto político en el que el radicalismo santafesino volvió a ocupar un lugar central en la conducción del Estado provincial, la reasunción de Felipe Michlig como presidente de la Unión Cívica Radical de Santa Fe no fue un acto meramente formal ni partidario. Por el contrario, el evento funcionó como una reafirmación política e institucional del rol histórico del radicalismo, de sus valores fundacionales y de la responsabilidad que implica gobernar en nombre de una tradición que hizo de la democracia, la ética pública y la participación ciudadana sus principales banderas.
El hecho de que hoy la provincia esté gobernada por un dirigente radical, Maximiliano Pullaro, potencia esa responsabilidad. En ese marco, el radicalismo no solo se enfrenta al desafío de administrar, sino también al de ser coherente entre su prédica histórica y su ejercicio del poder. Ese mensaje atravesó buena parte de los discursos pronunciados durante el multitudinario acto realizado en la sede del Comité Provincial, en la ciudad de Santa Fe, que además ofició como escenario de la inauguración de obras largamente esperadas para la puesta en valor de un edificio emblemático para la vida política santafesina.
Felipe Michlig fue proclamado para cumplir un nuevo mandato como presidente del Comité Provincial de la UCR para el período 2025–2027, tras haberse completado un proceso electoral interno con lista única, resultado de un amplio consenso y respaldo unánime de todos los sectores partidarios y de la militancia. Se trata del quinto mandato del actual senador provincial al frente del radicalismo santafesino, consolidando un liderazgo que ha sabido articular gestión institucional, vida partidaria y construcción política territorial.
El acto contó con la presencia del gobernador Maximiliano Pullaro, autoridades provinciales, legisladores, intendentes, presidentes comunales, militantes de distintos puntos de la provincia y referentes de los partidos que integran el frente Unidos para Cambiar Santa Fe. También participaron los integrantes salientes y entrantes de la Mesa Directiva y de los distintos órganos internos del partido.
Una sede renovada como símbolo político
La ceremonia tuvo un fuerte componente simbólico con la inauguración de las obras de remodelación del histórico Comité Provincial, trabajos realizados durante la gestión de Michlig con el aporte de los afiliados. Tras el descubrimiento de una placa conmemorativa y el tradicional corte de cintas, los presentes recorrieron las instalaciones renovadas, que ahora presentan una infraestructura moderna, funcional y adecuada para la formación política y el encuentro militante.
Las obras estuvieron a cargo de la empresa Mariano Panetto y apuntaron a recuperar un espacio que, durante muchos años, aguardó una intervención acorde a su valor institucional. En ese sentido, la puesta en valor del edificio fue leída como una señal política: el radicalismo no solo gobierna, sino que también fortalece sus estructuras partidarias.
Al tomar la palabra, Michlig destacó que el objetivo fue “tener una sede moderna y con todas las comodidades, donde podamos contener y formar nuevos dirigentes”, especialmente en un escenario donde la futura reforma de la Constitución provincial abrirá paso a un recambio progresivo de la dirigencia política. “Este es un espacio emblemático para la vida política, cívica y democrática de nuestra provincia”, subrayó.
Además, anunció que ya comenzaron las tareas de puesta en valor del Comité de Rosario y que el objetivo es avanzar, en esta y en futuras gestiones, con los comités del resto de los 17 departamentos.

El respaldo político y la reivindicación del partido
Durante el acto hicieron uso de la palabra distintos referentes del radicalismo, entre ellos Carlos Torres, Natalia Sánchez, Carlos Fascendini, Sergio “Checho” Basile, el presidente de la UCR nacional Leonel Chiarella, el propio Michlig y el gobernador Pullaro.
En su discurso, Pullaro felicitó a Michlig por la tarea realizada al frente del partido y lo definió como “un trabajador incansable, un visionario y un líder del que aprendemos todos los días”. A su vez, remarcó la importancia de fortalecer los partidos políticos como espacios de debate, construcción colectiva y compromiso democrático.
“Ver a nuestro partido en estas condiciones nos llena de orgullo porque creemos en los partidos, como nos enseñó Raúl Alfonsín”, afirmó.
“Recuperar y fortalecer este lugar es también renovar el espíritu de participación, transparencia y vocación de servicio que define a nuestro partido”, concluyó el gobernador, en una clara reivindicación del rol institucional del radicalismo en el presente político santafesino.
Encuentro con el presidente nacional de la UCR
Horas antes del acto, Felipe Michlig, en su rol de presidente pro tempore del Senado santafesino, recibió en la Sala de la Presidencia de la Cámara alta al intendente de Venado Tuerto, Leonel Chiarella, recientemente electo presidente de la UCR a nivel nacional y el más joven en ocupar ese cargo en los 135 años de historia del partido.
Tras el encuentro, Chiarella señaló que la reunión permitió abordar una agenda compartida vinculada a la gestión provincial, proyectos para Venado Tuerto y temas partidarios relacionados con su nuevo rol nacional.
“Nuestro propósito es tratar los temas que le importan a la gente, cualquiera sea el lugar que uno ocupe”, sintetizó.
Al referirse al futuro del radicalismo, destacó las fortalezas del partido y su despliegue territorial.
“Somos un partido de gobierno, con más de 500 intendentes y jefes comunales, cinco gobernadores y miles de dirigentes que todos los días enfrentan los problemas cotidianos. No le tememos a las responsabilidades ni a los desafíos”, afirmó.
Chiarella también resaltó el liderazgo del radicalismo santafesino, al señalar que “da muestras de amplitud y diálogo”, y sostuvo que ese camino es el que debe proyectarse a nivel nacional. En cuanto a los referentes históricos, mencionó a Yrigoyen, Illia y Alfonsín, y ubicó al gobernador Pullaro dentro de esa tradición, destacando su decisión política para enfrentar al narcotráfico y su visión estratégica para resolver los problemas de la provincia.
Finalmente, definió a Felipe Michlig como “un gran trabajador y líder que siempre apuesta al diálogo”, una cualidad que consideró imprescindible en el actual escenario político.



