Convocada para las 14 de este martes 6 de Febrero, se espera que la oposición más crítica busque dilatar la reunión. Desde el oficialismo confían en que los acuerdos que se alcancen hasta este martes permitan un desarrollo ágil.
Con el tercer cuarto intermedio dispuesto en la tarde del viernes, el debate del proyecto de ley de Bases y Puntos de Partida para la Libertad de los Argentinos sigue acumulando récords. Ahora también es la sesión que más cuartos intermedio ha sumado.
Pasa que el recurso del cuarto intermedio no es algo a lo que los oficialismos de turno sean afectos. Pasa que hacerlo estira los debates y con lo complicado que suele ser reunir el quórum, prefieren no tener que reiniciar una sesión con el riesgo de que al segundo día algún alma libre no regrese. No ha sido el caso de este debate, que encontró en este recurso un elemento para descomprimir y, sobre todo, dar tiempo para negociar.
Aunque eso implique estirar mucho más de lo deseado un tema que el presidente Javier Milei decía pretender tener listo para el 25 de enero. Cosa que todo el mundo siempre supo que no sucedería. Hasta los más pesimistas lo que auguraban era que el trámite se dilatara por su tratamiento en el Senado, no porque se eternizara la discusión en la Cámara baja.
En el plenario de comisiones quisieron darle un tratamiento rápido, que se agotara en las reuniones informativas con los funcionarios. Después, para permitir el avance de la negociación, el oficialismo concedió habilitar una reunión informativa para representantes de la sociedad civil. Al final fueron tres, pues mientras tanto anudaban acuerdos que permitieran llegar al recinto con certezas.
Se habló de sesionar un sábado, con la premisa de adelantarse al paro de la CGT, cosa que la oposición dialoguista desaconsejó. Al final, arrancaron el miércoles pasado y anticiparon la posibilidad de tener cuartos intermedios. parlamentario.com adelantó el martes 30, después de la reunión de Labor Parlamentaria, el siguiente esquema: tres días de sesión, con dos cuartos intermedio. Eso sucedió, pero la sesión aún no ha concluido.
Y ya es la más larga que se recuerde; con ya más de 30 horas acumuladas, supera a la del 18, 19 y 20 de diciembre de 2017, recordada por las 14 toneladas de piedras, que incluyó un cuarto intermedio y una duración de 28 horas y 8 minutos en total.
Para encontrar algo parecido en materia de cuartos intermedios hay que remontarse a 2001, cuando el 27 de noviembre se inició una sesión con un sinfín de temas -la última del período ordinario de Fernando de la Rúa-, que tuvo dos cuartos intermedios y concluyó a las 23.07 del 29 de noviembre. Pero fue más breve en extensión, pues demandó poco más de 15 horas.
Cómo sigue la sesión
Una ventaja que tuvo el oficialismo a lo largo de las reuniones de la semana que pasó fue que, salvo en el arranque del martes, ya no necesitó quórum para cada reanudación. En rigor, no la necesitará este martes, cuando a las 14 deba reiniciarse el debate, por más que lo que viene sean votaciones sucesivas en particular.
Como ha sucedido miércoles, jueves y viernes, en la reanudación de esta sesión habrá seguramente cuestiones de privilegio. Los incidentes registrados en las jornadas anteriores serán objeto de cuestiones de privilegio, entre otras cuestiones.
Pasado ese trámite que demandará seguramente alrededor de una hora, comenzará el debate en particular. Artículo por artículo, según anticiparon fuentes de La Libertad Avanza, y ya a partir de entonces tendrá que mantenerse el quórum hasta el final, pues las votaciones serán constantes.
Un dato a favor de la agilidad del debate: las votaciones serán a mano alzada. Salvo que se pidan votaciones individuales, como sucederá para todos aquellos temas controversiales, que son los que sobran en este proyecto.
¿Habrá debate en cada artículo? “Técnicamente se puede, pero yo aspiro a que el Gobierno salde algún debate que tiene pendiente con los bloques aliados (no el nuestro) y vayamos rápido”, explicó una fuente consultada por parlamentario.com.
Si eso está cerrado, “todo lo que propongan la izquierda o los K se rechaza y se sigue adelante”, concluyó.
¿Qué extensión tendrá este debate? En la reunión de Labor del martes de la semana pasada se aventuró 12 horas de debate en particular. Pero fue un cálculo extremo. Si se tiene en cuenta que los debates en particular con los proyectos de presupuesto suelen demandar entre 3 y 4 horas, este proyecto debería tener esa extensión aproximada. Pero teniendo en cuenta que en este caso hay una gran diversidad de temas y mucho interés de algunos por extender la sesión, seguramente se alargará.
El oficialismo y sus aliados dan por descontado que el kirchnerismo intentará dilatar la sesión, como así también estará nuevamente muy atento a lo que suceda en la calle, donde se descuenta volverá a haber movilización e incidentes.
“Creo que no lo van a lograr, porque el acuerdo para la ley, con algunos grises que quedan, ya está y no va a cambiar”, estimó ante parlamentario.com la diputada Silvia Lospennato, que se manifestó convencida de que “no hay una demanda genuina de la gente de no aprobar la ley. Hay un intento de los que perdieron la elección de ganar por otros medios, pero eso a menos de 60 días de un gobierno no va a suceder porque las fuerzas republicanas que sumadas a las libertarias somos mayoría. No lo vamos a permitir. Al final lo van a entender”.