El intendente de Rosario presentó un balance fiscal de la gestión municipal y advirtió que la ciudad sigue aportando más de lo que recibe. Apuntó contra el retiro del Estado nacional en salud, transporte y obras públicas.
El intendente de Rosario, Pablo Javkin, encabezó este jueves la presentación pública de la Rendición Anual de Cuentas de la Municipalidad. En un acto realizado en el Galpón 11, ante empresarios, entidades productivas y organizaciones sociales, el mandatario local detalló los principales indicadores económicos de su gestión, destacó el saneamiento de las finanzas municipales y volvió a poner en agenda la discusión por una distribución más equitativa de los recursos que el Estado nacional recauda.
“De cada 100 pesos que aporta Rosario en impuestos, sólo 5 vuelven en forma de inversión pública”, afirmó Javkin, acompañado por todo su gabinete. La frase, que ya ha sido reiterada por el intendente en distintos foros nacionales, volvió a resonar como uno de los ejes del discurso que combinó resultados de gestión con reclamos estructurales hacia el gobierno central.
Durante la exposición, el intendente repasó los logros alcanzados en materia de equilibrio fiscal y mostró cómo el superávit de las cuentas municipales se traduce en obras concretas. “Esto que antes era una situación de endeudamiento y déficit, hoy nos permite invertir. Y un Estado necesita tener superávit precisamente para eso: para hacer obras”, señaló.
En ese marco, enumeró mejoras en pavimentación, cloacas, veredas, arbolado urbano, renovación de luminarias LED y recuperación de espacios públicos, entre otras intervenciones urbanas. También subrayó la incorporación de 130 nuevas unidades al transporte urbano de pasajeros y la compra de 2.000 contenedores para la recolección de residuos. “Estamos haciendo prácticamente una vez y media lo que corresponde a cada año en mantenimiento urbano, para equilibrar años de atraso”, remarcó.
A su vez, Javkin defendió el modelo fiscal aplicado por su administración, basado en la simplificación tributaria y la reducción de tasas. “En dos años eliminamos 40 de las 80 tasas municipales. Muchas de ellas generaban más burocracia que ingresos”, explicó, y aseguró que esa política continuará en los próximos meses.
Sin embargo, el foco del mensaje estuvo puesto en el deterioro del esquema de reparto de fondos a nivel nacional y en la ausencia del gobierno central en áreas sensibles. “La Nación ha dejado el fondo de transporte, los programas de vacunación, el tratamiento oncológico, la salud reproductiva. Todo eso lo ha absorbido el municipio, con recursos propios”, advirtió, y estimó que durante 2024 el Estado local debió asumir unos 24.000 millones de pesos para cubrir programas que antes financiaba el Estado nacional.
“La carga fiscal está completamente desbalanceada. Rosario aporta mucho más de lo que recibe. Esta lógica viene desde hace 20 o 30 años y hay que discutirla”, afirmó el intendente. También cuestionó la distribución de los fondos provenientes del impuesto a los combustibles, cuyo aumento no se tradujo en obras viales ni en subsidios para el transporte del interior.
En línea con lo planteado días atrás en el Consejo Federal de Intendentes realizado en Tucumán, Javkin volvió a reclamar un nuevo régimen de coparticipación que invierta la lógica actual. “Los recursos no pueden seguir distribuyéndose de arriba hacia abajo. Debemos construir un esquema que piense la Argentina desde sus ciudades hacia la Nación, y no al revés”, concluyó.
