El gobernador de Santa Fe, Maximiliano Pullaro, y el CEO de Mercado Libre, Marcos Galperin, protagonizaron en los últimos días una fuerte disputa a raíz del incremento de la alícuota de Ingresos Brutos en la provincia, que pasó del 5% al 9% para los proveedores de servicios de pago. Esta medida, impulsada por el gobierno provincial, afecta directamente a las fintech y ha sido fuertemente cuestionada por Mercado Libre, que la considera injusta y perjudicial para las PyMEs y consumidores.
Galperin respondió a las acusaciones de Pullaro, quien había afirmado que la plataforma permite operaciones «en negro» y que la empresa utiliza fondos de usuarios para especulaciones financieras. Mercado Libre rechazó estas afirmaciones, asegurando que cumple con todas sus obligaciones fiscales y que su ecosistema promueve la formalización de los comercios. Además, el empresario sostuvo que la suba de impuestos desalienta la inversión y el desarrollo económico.
Por su parte, Pullaro reafirmó que la provincia busca gravar las operaciones no declaradas, y negó que se trate de un aumento impositivo generalizado. Según el gobierno santafesino, en diciembre se detectaron cerca de 40 mil transacciones sin registrar dentro de la plataforma de Mercado Libre. El ministro de Economía, Pablo Olivares, justificó la medida señalando que se establecieron alícuotas diferenciadas para vendedores formales e informales, incentivando así el cumplimiento tributario.
En medio de la controversia, Mercado Libre lanzó un comunicado con el lema «#BastaDeIngresosBrutos», denunciando el efecto distorsivo de este tributo sobre los precios y criticando su impacto negativo en la economía digital y los emprendedores.
Para bajar impuestos hay que bajar el gasto
Paralelamente a la discusión impositiva, la gestión de Pullaro enfrenta hace rato fuertes acusaciones por el gasto público y político en la provincia. Algunos diputados provinciales y figuras políticas nacionales han denunciado que el gobierno provincial recorta fondos previsionales mientras aumenta el número de asesores y destina recursos millonarios a publicidad oficial y la planta política.
Según detalla un relevamiento presentado a este medio por un sector opositor al Gobierno Provincial, hay más de 1200 nombramientos de lo que se denomina “Asistente Técnico”, una figura que fue ampliada a través de un decreto ni bien asume Pullaro donde se llevaron al doble de categorías, con salarios que oscilan entre los $ 400 mil pesos y los $ 2 millones de pesos. Sin carga horaria fija.
La legisladora pro vida, Amalia Granata, expuso hace un tiempo los altos salarios de funcionarios y asesores, revelando que un ministro percibe más de 9 millones de pesos mensuales, mientras que los asesores políticos también tienen ingresos elevados. Según la legisladora, Pullaro incrementó la cantidad de asesores por encima de los niveles de la gestión anterior y destina una fuerte suma a medios afines para mejorar su imagen.
En la misma línea y sorpresivamente, la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, marcó diferencias a fin de año pasado con el gobernador santafesino, señalando que Santa Fe es una de las provincias con mayor gasto político. En una entrevista con Radio 2, la funcionaria del gobierno de Javier Milei declaró que la provincia tiene «uno de los gastos políticos más altos del país» y aseguró que buscarán «dar esa pelea».
Aunque, en ese momento, puso paños fríos aclarando que esa visión no afectará a la cooperación en materia de seguridad
Esta discusión sobre el aparente despilfarro de fondos públicos, sostenidos por el alto incremento de las tasas impositivas -entre ellas ingresos brutos-, también tuvo una página polémica con respecto a la pauta publicitaria. Desde la contratación de Susana Gimenez para una publicidad del Quini 6 (desmentido rápidamente por Lotería de Santa Fe en su momento), como la asignación de 2.000 millones de pesos en pauta publicitaria a un conocido grupo mediático de la ciudad de Rosario.
Las denuncias sobre el uso discrecional de los fondos, junto con la tensión con el sector privado por los cambios tributarios, marcan un inicio de gestión conflictivo para Pullaro, quien debe equilibrar la necesidad de aumentar la recaudación con las críticas por el alto costo político y la presión del empresariado santafesino.
El relato de la eficiencia y la austeridad
Desde su asunción, Maximiliano Pullaro ha buscado instalar la imagen de una gestión austera y eficiente. Su administración ha promovido diversas medidas de reducción del gasto político, como la disminución del número de ministerios, la reducción de la flota de vehículos oficiales y la limitación de los viáticos de funcionarios.
Son comunes las declaraciones de Pullaro asegurando que su gobierno trabaja «24/7 para mejorar los servicios del Estado cuidando los recursos». Para contarle un poroto al Gobernador, vale destacar que el Decreto 180 estableció un ajuste en los gastos de los funcionarios políticos, incluyendo el uso de vehículos particulares para tareas oficiales, el tope en los montos de alojamiento y la prohibición de que los funcionarios ingresen a planta permanente una vez finalizada su gestión.
Veremos, al final de la historia, si esto fue llevado a cabo como estaba en los papeles.
Empresarios exitosos arrepentidos de invertir en Santa Fe
Al aumentar la alícuota del impuesto sobre los Ingresos Brutos y desatar esta controversia con empresarios y emprendedores que invierten en Santa Fe, se suman nuevos reclamos del sector productivo, y algunos inversores advierten que podrían abandonar la provincia.
Hernán Regiardo, es un influencer reconocido y empresario exitoso, creador de la marca de yerba mate Cósmico, es oriundo de la localidad del departamento Caseros, Arequito, y en las últimas horas expresó su indignación en redes sociales por esta discusión y cuestionó abiertamente la política fiscal del gobierno provincial.
“Abrimos Cósmico en Santa Fe para apoyar la provincia donde nací, sin pensarlo dos veces, y es triste ver que quieren subir Ingresos Brutos al doble que cualquier otra provincia,
cuando todos sabemos que es el impuesto más injusto de todos”, publicó en su cuenta de X y completo “Ojalá que puedan repensarlo, para que no tengamos que mover nuestra empresa a otra provincia”, acompañado de un emoji de corazón roto y la bandera argentina.
El mensaje de Regiardo se viralizó rápidamente, acumulando comentarios y respuestas de usuarios que lo alentaban a trasladarse a Entre Ríos o Córdoba, donde la presión fiscal es menor. Sin embargo, también recibió una respuesta directa desde el gobierno. El secretario general de la Gobernación, Juan Cruz Cándido, le contestó: “Evidentemente el plan de negocios de Cósmico lo hiciste mejor asesorado que este tweet. La política tributaria en Santa Fe no está en debate (se debate todos los fines de año) y la prevista para este año contempla estabilidad fiscal e importantes ventajas para los que producen en blanco”.
La reacción del sector privado refleja una creciente preocupación por la carga impositiva en la provincia. Luego de esto, no será la primera vez que un inversor manifieste su descontento con la presión fiscal santafesina, pero el caso de Regiardo expone una visión del empresariado sobre la forma de gestión de los tributos en la gestión de Pullaro. Mientras tanto, con la soberbia del relato sesgado, la incertidumbre sobre el futuro de nuevas y mejores inversiones en la provincia persiste.