La legisladora del PRO impulsa una reforma que busca modernizar el sistema electoral provincial, acotando los tiempos de campaña y eliminando restricciones comerciales durante los comicios.
En un contexto de creciente debate sobre la vigencia y funcionalidad de las normativas electorales en Argentina, la diputada provincial por el PRO, Ximena Sola, presentó un proyecto de ley que propone la eliminación de la veda electoral en Santa Fe. La iniciativa busca suprimir las restricciones que rigen durante las 48 horas previas a cada elección, y que —según argumenta— resultan obsoletas y perjudiciales para el sector privado.
«La veda electoral es una figura paternalista, arcaica y costosa, que subestima la capacidad del electorado y afecta la actividad económica», sostuvo Sola al dar a conocer su propuesta. En concreto, su proyecto plantea sustituir el esquema actual por una campaña electoral concentrada en los 30 días previos al acto comicial, sin restricciones al comercio ni limitaciones excesivas a las actividades públicas y privadas.
¿Qué busca cambiar el proyecto?
Actualmente, la veda electoral impone un conjunto de prohibiciones que incluyen desde la publicidad política y actos de campaña hasta la venta de bebidas alcohólicas, el funcionamiento de locales bailables y la realización de espectáculos públicos. Estas restricciones se aplican desde 48 horas antes de la elección hasta tres horas después de su cierre. En Santa Fe, además, la normativa impide actividades como la difusión de encuestas, actos de proselitismo y funcionamiento de locales partidarios cerca de los centros de votación.
Para la diputada, muchas de estas medidas no sólo han perdido sentido en la era digital —donde las redes sociales quedan exentas y los candidatos continúan haciendo campaña online sin control—, sino que también generan un impacto económico negativo. «No tiene lógica que se paralice parte del comercio por un proceso electoral. Esto representa una carga injustificada para miles de emprendedores, comerciantes y trabajadores», explicó Sola.
Libertad, responsabilidad y transparencia
El proyecto no propone una desregulación total, sino una reconfiguración más moderna del calendario electoral. Limita la duración de la campaña a 30 días —una medida que busca reducir la saturación informativa— y promueve la libertad de expresión y circulación comercial incluso durante el fin de semana electoral. La diputada sostiene que esta reforma está alineada con los valores de libertad, responsabilidad individual y transparencia institucional, y que permitirá fortalecer el vínculo entre la ciudadanía y el sistema democrático.
«Es tiempo de actualizar nuestras leyes para que reflejen la realidad de una sociedad informada, autónoma y activa. No necesitamos tutelaje estatal sobre cómo pensar o actuar durante una elección», sentenció.
Un debate que se instala
La propuesta de Ximena Sola se da en medio de una creciente discusión nacional sobre la necesidad de revisar el Código Electoral, tanto a nivel nacional como provincial. Mientras otros sectores políticos han defendido la veda como una herramienta para garantizar la «reflexión» del electorado, voces como la de Sola plantean que ese objetivo puede alcanzarse sin recurrir a prohibiciones que interfieren con las libertades civiles y la actividad económica.
De avanzar en la Legislatura, el proyecto podría sentar un precedente en materia de modernización electoral en el país, abriendo la puerta a reformas similares en otras jurisdicciones.